| 2 cuotas de $14.950 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $29.900 |
| 1 cuota de $29.900 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $29.900 |
| 2 cuotas de $14.950 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $29.900 |
| 3 cuotas de $12.866,96 | Total $38.600,90 | |
| 6 cuotas de $7.318,52 | Total $43.911,14 | |
| 9 cuotas de $5.450,43 | Total $49.053,94 | |
| 12 cuotas de $4.541,81 | Total $54.501,72 | |
| 24 cuotas de $3.507,14 | Total $84.171,49 |
| 3 cuotas de $12.872,94 | Total $38.618,84 | |
| 6 cuotas de $7.066,86 | Total $42.401,19 | |
| 9 cuotas de $5.287,98 | Total $47.591,83 | |
| 12 cuotas de $4.330,76 | Total $51.969,19 |
| 3 cuotas de $13.332,41 | Total $39.997,23 | |
| 6 cuotas de $7.916,02 | Total $47.496,15 |
| 18 cuotas de $3.812,91 | Total $68.632,46 |
| 1 cuota de $29.900 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $29.900 |
Hay crímenes que desafían la lógica. Su rango de singularidad abre la puerta a una historia mayor. A un caso de esta naturaleza se enfrenta el inspector Izidine Naíta. Es un policía de ciudad y debe investigar el asesinato del director de un asilo, albergado en un edificio que fue una legendaria fortaleza, ubicada lejos de la modernidad urbana. El país es Mozambique; el año, 1976. Poco tiempo atrás hubo una revolución, entre otras misiones, aspira a dejar atrás la cultura ancestral, los mitos y las leyendas.
La primera sorpresa surge en los interrogatorios: cada uno de los sospechosos se declara culpable; cada uno detalla las buenas razones que lo llevaron a cometer el crimen. El inspector no tiene más remedio que investigarlos, hurgar en el pasado de sus vidas y de la región; vale decir, en el Mozambique que la revolución quiere sepultar.
No se dará tan fácilmente por vencido. Mientras avanza la investigación, el relato se puebla de episodios fabulosos y violentos. Un fallecido vuelve brevemente a la vida porque no ha muerto “bien” y que puede convertirse en héroe nacional, las leyendas populares se imponen a la investigación detectivesca, la tradición del lugar, una tradición donde la fantasía y la magia son aliadas y hermanas de la mera realidad y no rivales, se convierte en actor principal.
Solo un escritor como Mia Couto, de una destreza narrativa notable, puede convertir una trama policial en una impecable y sorprendente novela sobre el destino de un país. Su escritura diáfana, su magistral manejo de los tonos, sumerge al lector en un palpitante y colorido misterio. Al cabo, en La terraza del frangipani el crimen primordial no es el del director del asilo, sino el pasado de un pueblo, aquello que se quiere eliminar.
