| 2 cuotas de $23.150 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $46.300 |
| 1 cuota de $46.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $46.300 |
| 2 cuotas de $28.168,92 | Total $56.337,84 | |
| 3 cuotas de $19.350,31 | Total $58.050,94 | |
| 6 cuotas de $10.586,49 | Total $63.518,97 | |
| 9 cuotas de $7.596,28 | Total $68.366,58 | |
| 12 cuotas de $6.111,60 | Total $73.339,20 | |
| 24 cuotas de $4.360,49 | Total $104.651,89 |
| 3 cuotas de $19.933,69 | Total $59.801,08 | |
| 6 cuotas de $10.943 | Total $65.658,03 | |
| 9 cuotas de $8.188,41 | Total $73.695,71 | |
| 12 cuotas de $6.706,16 | Total $80.474,03 |
| 3 cuotas de $19.990,79 | Total $59.972,39 | |
| 6 cuotas de $11.257,07 | Total $67.542,44 |
| 18 cuotas de $4.905,74 | Total $88.303,36 |
| 1 cuota de $46.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $46.300 |
«Todos tenemos mucho que aprender, y cada nuevo jardín encierra una nueva oportunidad de hallar inspiración. Aunque nos sepamos de memoria un jardín, el año tiene doce meses, y cada mes ofrece un jardín diferente con muchos hallazgos inesperados.»
Este libro fue el origen de todo lo que vendría luego para Margery Fish y para muchos jardineros del mundo que se inspiraron en su trabajo. En la década de 1930, cuando la guerra ya se cernía sobre ellos, Margery y su marido Walter se marcharon de Londres y compraron una casa en ruinas y un corral en East Lambrook Manor, Somerset, con la intención de rehabilitar la y hacer un jardín. Este libro es el relato de su aventura. Margery y Walter tenían ideas muy contrapuestas acerca del jardín. En primer lugar, estaba el jardín que Walter quería: un desfile suburbano reglamentado de senderos, césped y dalias. Y luego estaba el jardín que Margery anhelaba y que de hecho creó con éxito en los años posteriores a la muerte de su marido en 1947: una especie de jardín armonioso, informal y espumoso, con sus bordes llenos de flores «verdes» y sus rincones sombreados repletos de flores.
En 1956, Vita Sackville-West escribió una reseña del libro para The Observer y no escatimó en elogios. «Es», —dijo— «de una mujer que, con su marido, creó de montones de basura el tipo de jardín que a todos nos gustaría tener, desafío cualquier jardinero a no encontrar en estas memorias placer, estímulo y felicidad».
