| 2 cuotas de $18.150 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
| 1 cuota de $36.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
| 2 cuotas de $18.150 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
| 3 cuotas de $15.621,10 | Total $46.863,30 | |
| 6 cuotas de $8.885,03 | Total $53.310,18 | |
| 9 cuotas de $6.617,08 | Total $59.553,78 | |
| 12 cuotas de $5.513,97 | Total $66.167,64 | |
| 24 cuotas de $4.257,83 | Total $102.188,13 |
| 3 cuotas de $15.628,36 | Total $46.885,08 | |
| 6 cuotas de $8.579,50 | Total $51.477,03 | |
| 9 cuotas de $6.419,85 | Total $57.778,71 | |
| 12 cuotas de $5.257,75 | Total $63.093,03 |
| 3 cuotas de $16.186,17 | Total $48.558,51 | |
| 6 cuotas de $9.610,42 | Total $57.662,55 |
| 18 cuotas de $4.629,05 | Total $83.323,02 |
| 1 cuota de $36.300 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $36.300 |
«Señor, Salvador de mi alma, ¿adónde me has conducido? Aquí estoy, en la torre de los condenados, asesino convicto, y mañana, al amanecer, ¡me llevarán a la horca y seré colgado! Pues quien dé muerte a un semejante debe ser muerto; esta es la ley de Dios y del hombre.»»
En 1680, el remoto monasterio de Berchtesgaden en los Alpes bávaros fue el escenario del desgraciado amor entre Ambrosio, un joven franciscano, y Benedicta, la hija de un verdugo. Dos siglos más tarde, Ambrose Bierce interpretó los siniestros pormenores de la leyenda hasta convertirla en su única novela y en una de las cimas de la literatura gótica, en la que se mezclan la fe, el deseo, la culpa y la redención.
La historia de El monje y la hija del verdugo empieza con la llegada del joven franciscano que, horrorizado por el trato de los habitantes de la zona hacia la muchacha a causa de la ocupación de su padre, emprende una lucha para protegerla bajo el pretexto de la caridad cristiana. Sin embargo, poco a poco y sin darse cuenta, irá cayendo en una fatal atracción de la que tratará de huir.
El admirable suspense de estas páginas discurre en unos paisajes alpinos de naturaleza abrupta y lúgubre, que influyen tanto en la historia como en los propios protagonistas, impregnados de un aura morbosa que les arrebata los sentidos y los conduce hacia las más bajas pasiones. Este clima de terror se ve potenciado por los esgrafiados de Santiago Caruso, que se abisman en este relato de amor prohibido, destrucción y tragedia. «Decir que se centra el conflicto en la lucha entre Amor y Misión sería generar un gastado déjà vu. Yo lo concibo como una batalla entre Naturaleza y Religión. Pensé entonces en pintar lo animal y lo vegetal invadiendo la percepción de la moral del mundo del Hombre y de Dios», explica el ilustrador argentino.
