| 2 cuotas de $12.500 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.000 |
| 1 cuota de $25.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.000 |
| 2 cuotas de $12.500 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.000 |
| 3 cuotas de $10.758,33 | Total $32.275 | |
| 6 cuotas de $6.119,16 | Total $36.715 | |
| 9 cuotas de $4.557,22 | Total $41.015 | |
| 12 cuotas de $3.797,50 | Total $45.570 | |
| 24 cuotas de $2.932,39 | Total $70.377,50 |
| 3 cuotas de $10.763,33 | Total $32.290 | |
| 6 cuotas de $5.908,75 | Total $35.452,50 | |
| 9 cuotas de $4.421,38 | Total $39.792,50 | |
| 12 cuotas de $3.621,04 | Total $43.452,50 |
| 3 cuotas de $11.147,50 | Total $33.442,50 | |
| 6 cuotas de $6.618,75 | Total $39.712,50 |
| 18 cuotas de $3.188,05 | Total $57.385 |
| 1 cuota de $25.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $25.000 |
En 1996, Allen Ginsberg tenía setenta años, se encontraba muy delicado de salud y le quedaba apenas un año de vida. Impulsado quizá por la urgencia de cantar unas últimas verdades, y a pesar de sus escasas apariciones públicas durante aquel período, el poeta beat se lanzó a un gran proyecto final: el de musicar, en colaboración con Paul McCartney y Philip Glass, una colección de pequeños poemas que acababa de publicar en la revista The Nation: se trataba de la Balada de los esqueletos.
Inspirados en la festividad mexicana del Día de los Muertos, estos esqueletos universales reproducen y padecen los males de nuestra sociedad, ejercen y a la vez sufren el poder, dejándose el cuerpo en ello. Entre todos conforman la danza macabra del sistema de agotamiento, explotación y destrucción en que vivimos. Sus versos, tan radicales como divertidos, azote de la moral estadounidense, mantienen hoy su feroz condición de sátira carnavalesca, cobrando una sorprendente y acaso terrorífica actualidad.
Esta edición bilingüe cuenta con la traducción de Andrés Neuman: una versión brillante y creativa que hace honor a la fuerza, el humor sarcástico, la expresividad y sonoridad de sus versos originales; así como con los memorables grabados del artista mexicano José Guadalupe Posada que, según el propio Ginsberg, supusieron una fuente de asombro poético.
