palabras peregrinas: la traducción en las ciencias conjeturales, irene agoff

$10.000

Traducir es caminar sobre una cuerda floja, apostar a la posibilidad de mantenerse en pie, y hasta con cierta elegancia, cuando todo nos empuja hacia uno u otro lado de la cuerda. Esa cuerda es la frontera imaginaria que, sin remedio, tenemos que suponer como línea divisoria entre las lenguas. De hecho, tal frontera no existe. Las lenguas suenan, resuenan, están en el aire en cuanto soporte de las voces humanas. Por más que pasen al escrito y se vuelvan objetos de lectura, su naturaleza primera no se pierde: al estar en el aire, se cruzan y superponen y entremezclan sin la más mínima prudencia. Pues esas voces hablan incontables lenguas distintas.

Irene Agoff

Compartir: